Posiblemente mucha gente piensa que el ser profesor no es algo muy importante, pero considero esta profesión como una gran aventura como lo menciona el titulo de esta redacción, pero esto según lo que queramos ver y vivir, ya que esta llena de triunfos, pero también fracasos, con los cuales aprendemos y tenemos la oportunidad de mejorar.
Me imagino que la mayoría de nosotros recordamos tal vez no el primer día de clases, pero si el primer año, y sobre todo lo recordamos por lo mismo que nos menciona la lectura, por el miedo de no saber articular teoría con la práctica, a las burlas de nuestros propios alumnos, sin embargo después de practicar aquel ensayo y error que nos menciona la lectura, podemos disfrutar de las actividades que realizamos dentro del aula, a la vez que investigamos, organizamos, planeamos estrategias y situaciones didácticas para nuestros alumnos, también nosotros estamos aprendiendo a la par con ellos, tomando siempre en cuenta sus necesidades para elegir estrategias adecuadas que las atiendan, atendiendo a su diversidad, así como la elaboración de una situación didáctica basada en competencias.
Muchos tenemos miedo a cometer un error, por lo tanto nunca aplicamos actividades innovadoras dentro de nuestras aulas y seguimos cayendo en el tradicionalismo, por lo que nunca se da ese aprendizaje sobre cómo brindar y disfrutar de “una buena clase”, la cual he disfrutado en muchas ocasiones y que me ha brindado tanto aprendizajes significativos como dificultades a las que me he tenido que enfrentar , pero estas me han permitido reflexionar sobre mi trabajo dentro del aula y seguir mejorando, por lo cual termino mencionando que nunca cambiare mi aventura de ser maestra.
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